Se refiere a todos los apoyos que el adulto pueda ofrecerle al niño para que continúe adquiriendo más vocabulario y fomente su expresión oral, para lo cual aprovecha los periodos sensitvos del infante, su mente absorbente y su necesidad e interés por comunicarse. Todo lo que está alrededor del niño, así como la descripción de todo lo que se hace, es nombrado continuamente por los adultos a cargo, y junto con canciones, poemas, rimas, juegos y material de desarrollo que prepara la Guía (tarjetas con nomenclatura, objetos reales y temas específicos), consolida las bases del idioma, en este caso, el español.

Son las actividades cotidianas que se realizan en todo hogar, y que favorecen la adaptación del infante al núcleo familiar al que pertenece, a través del desarrollo de su independencia y autoestima, además de desarrollar otras habilidades como la concentración, el control de su cuerpo, la coordinación gruesa y fina. Estos ejercicios van dirigidos al cuidado de su propia persona, al cuidado del ambiente externo e interno, y a ejercicios de gracia y cortesía, que le permiten integrarse armónicamente como miembro de la sociedad.

Corresponde al área psico-senso-motora, que junto con el material de vida práctica proveen al infante de actividades inteligentes que involucran la ejercitación de su motricidad gruesa, fina y viso-motriz, así como su equilibrio, direccionalidad, orden y secuencia en sus actividades; habilidades que favorecen su independencia, su orden mental y lo preparan indirectamente hacia la lecto-escritura.

Es la forma libre en la que se invita a los pequeños a manifestar sus impresiones a través de diferentes propuestas que se cambian periódicamente, permitiendo así que experimenten con colores, texturas y diversidad de materiales.